Para poder trabajar en estos tiempos debes poner mucho de tu parte y cuando de verdad lo consigues debes incluso perder dinero durante los primeros años para poder ir viendo beneficios lo antes posible. Trabajar es complicado, pero trabajar de lo que te gusta o has estudiado mucho más, por eso no hay que perder la más mínima oportunidad cuando la tenemos delante, ser emprendedor es lo que nos lleva a salir de este pozo y a ver las cosas de otra manera. Yo hablo por mí porque hace ya hace mucho tiempo que estoy parada, estudié magisterio, y he trabajado en algunas ocasiones gracias a que me anuncié y he ido a muchas casas a dar clases a varios niños, lo que ocurre en todo esto es que a las madres la hora les parece cara y prefieren pagar por una academia en la que los niños van no están en casa, y viene con la papeleta resuelta, no se dan cuenta que de esta forma es una enseñanza personalizada solo que el precio se les va de las manos y no quieren pagarlo.
Pues nada viendo lo visto decidí abrir yo mi propia academia, cuando anduve los pasos que tuve que andar y tuve todo en regla me dispuse a montar mi propia academia, como os digo la gente huye de los precios altos, sino les dan un incentivo para quedarse huyen despavoridos, así ¿qué mejor que cobrarles lo mismo y darles el material que necesitan? Este tipo de ofertas llaman la atención, los chicos solo tenían que traer sus libros y el resto se lo daba yo, así que me decidí a no tirar piedras a mi propio tejado y no gastar más de lo necesario, tampoco pretendía poner un material de mala calidad así que me atreví a comprar material escolar online en principio no estaba muy segura pero os aseguro que los precios me terminaron de convencer porque es que además eran primeras marcas.
Así fue como dispuse todo el material en unos botes que compré también de manera online y encada mesa cada alumno tenía su material listo para ser usado, os puedo asegurar que me llueven los alumnos casi del cielo y es que la gente somos así en cuanto nos regalan algo nos llama demasiado la atención como para no ir corriendo a probarlo.